Como cambia todo, eh, cambian las estaciones y el tiempo, cambian
las modas y los gustos, cambian las leyes, las fronteras, la economía, la política, etc… Mírate,
¡pero si incluso tu has cambiado! (no digas que no) Tu y los demás, claro. Así
que de cambios vamos a hablar, pero en concreto de uno, de este blog, van a
haber cambios, y no pocos
A partir de ahora vamos a tener una continuidad con el blog.
Como si de un nuevo curso se tratase. Vamos a compartir conocimientos,
inquietudes, a enseñar y a aprender, a reflexionar, pensar, a veces mediante
sesudos textos y otras por simples cuentos, a expresar lo que sentimos y
queremos compartir. Vamos a empezar un camino, sin importar a donde ni cuando se
llegue a la meta, puesto que pronto descubrirás que no hay meta (pero de eso ya
hablaremos más adelante, habrá que dejar sorpresas…)
Así que como dijo Reinhold Niebuhr “Señor, concédeme la
serenidad de aceptar que hay cosas que no puedo cambiar, el valor de cambiar lo
que pueda cambiarse y la sabiduría para distinguir la diferencia”. Aquí no te
harás más sabio puesto que nadie lo puede hacer por ti, pero al menos encontrarás
pistas (o no, depende de ti)
Que empiece el baile!
No hay comentarios:
Publicar un comentario